lunes, 31 de octubre de 2011

Rico Día del Padre

Autor: Lukas
Cartagena, Colombia



Lo que les voy  a comentar me acaba de suceder esta semana, en la celebración del día del padre, mi nombre  es Lukas, vivo en una ciudad al norte de Colombia en la costa Caribe, tengo 38 años, soy moreno, contextura normal, me  considero bisexual pues disfruto del sexo sin miramientos en ambos lados de la cadena, físicamente no soy un adonis pero tengo mis encantos, soy una persona que por su trabajo suelo conocer mucha gente, eso ha permitido que tenga un círculo de amistades muy amplia.

De quien me voy a referir  es una persona encantadora, es un muchacho que conocí en un bar en plenas fiestas de mi ciudad, ese día se esperaba un gran número de personas pues había un concierto, para mal de muchos sucedió que cayó un tremendo aguacero el cual le arruinó la fiesta a muchos, yo estaba en ese bar y la mayoría de las personas que estaban en la calle esperando que se iniciara el concierto entraron a los diferentes sitios nocturnos que estaban abiertos, entre esos el bar en que yo estaba, el ambiente dentro del sitio era muy chévere, mientras en la calle llovía a cantaros en el sitio la música sonaba y la gente se divertía, yo estaba en la barra y charlaba con un chico que también conocí ese día, estábamos muy animados, cuando de pronto entró Juan, que así se llama él, es un tipo de alrededor 1.70 de estatura, 25 años, contextura normal, ni muy grueso ni muy delgado, blanco, su cabello castaño claro y una nariz perfecta, y para terminar unos ojos verdes encantadores y lo que más me gustó fue su sonrisa.

En seguida se puso cerca de mi, alrededor estaban muchas chicas que también estaban divirtiéndose, entre ellas una que siempre va al bar a ligar personas, esta niña se acercó a Juan y enseguida se lo levantó, yo me divertía y charlaba con mi amigo en la barra y de vez en cuando también salía a bailar, entre bromas empecé a tener conversación con Juan, la rumba estaba buena y ya cada quien bailaba con una pareja, de pronto Juan se va del sitio con la chica que lo había ligado, yo me dediqué a seguir mi rumba, después de alrededor de una hora Juan regresa y esta vez venía acompañado de 4 amigos más, fue directo adonde yo estaba y me presentó a sus amigos, ente ellos Carlos,  con  el cual enseguida entablé una buena conexión, para no serles muy extensivo me hice muy amigo de Carlos, él me comentó que eran militares, todos estos tipos están muy bien físicamente.

Del bar nos fuimos al concierto que inició muy tarde, en pleno concierto Juan se levantó a otra chica y se fueron juntos, al rato regresó de nuevo, pensé, este man es un semental y me sonreí internamente, la música sonaba, el ambiente seguía prendido, todos estábamos abrazados y empujándonos entre todos, y muy borrachos, al rato regresó Juan todo sonriente y contando que se había tirado a la chica, se hicieron las cinco de la mañana y cada quien emprendió rumbo a su casa, no sin antes intercambiar teléfonos.

Con Carlos entablé una bonita amistad, que se extendió más allá de ser amigos somos casi hermanos, y aunque lo trasladaron de base seguimos hablando y compartiendo, es más me invitó a su casa a conocer a sus papás y a su hijo.

¿Recuerdan a Juan?, pues a él lo trasladaron de base también,  yo tenía mucho tiempo sin saber nada de él pues desde esa noche solo nos encontramos un par de veces y era con chicas, o sea que cada quien estaba en lo suyo, esta semana antes de celebrar el día del padre, y casi 5 meses sin tener noticias de él, lo encontré en el MSN, me dijo que tenía un mes en la ciudad y me invitó a que saliéramos con unas amiguitas, y quedé en verlo el lunes festivo en el día a tomarnos unos tragos que estaba aburrido, que extrañaba a su familia, en eso quedamos, mi  sorpresa fue grande cuando el domingo a las 8:30 me llama que andaba con un amigo de la base y que fuera a tomarme unos tragos con ellos y de paso a pescar viejas.

El problema era que yo estaba acompañado de mi novia, es más cuando me llamó estaba teniendo sexo con ella, acepté salir y dejar a mi novia en mi casa toda rabiosa y echando chispas, llegué al sitio y ahí estaba Juan con su amigo, de inmediato me ofreció una cerveza y me presentó  a su amigo, le contó como nos habíamos conocido y los buenos amigos que resultamos Carlos y yo, hasta bromeó que parecíamos novios, eso me pareció chistoso, luego repasé el sitio y por cierto habían muchas nenas, luego de par de cervezas empezamos a bailar con una y otra sin conseguir ligar a ninguna, el tiempo fue pasando y su amigo dijo que debía que irse por que tenía turno a las 7 de la mañana y no podía trasnochar, salimos del bar y compramos una botella de ron en la licorera, despedimos a su amigo y nos sentamos en el andén a acabarnos la botella, la cual se fue en par patadas, regresamos por más, pero no nos quisieron vender tragos, caminamos a otra licorera en la cual tampoco pudimos comprar, para ese momento ya Juan estaba que no podía con su alma, se aferró  a mi por que no podía caminar, yo consideré que en ese estado no podía irse a la base y le propuse que se quedara en mi casa que estaba cerca.

Llegamos a la puerta y yo tratando de abrir la puerta cuando Juan pega su cuerpo al mío, pensé,  está muy borracho, pero noté que se me aferraba de una manera morbosa, no le di mucha importancia y lo tomé en broma, abrí  la puerta como pude y lo dirigí a la habitación, inmediatamente  noté que mi novia se había ido, furiosa, y me había desordenado el cuarto,  acosté a Juan en mi  cama y salí enojado a llamarla, no me contestó y decidí ir por una cerveza   a  la  licorera de la esquina, me tomé una y regresé a casa. Entré a mi habitación y me acosté junto a Juan, la verdad hasta el momento no había pensado en la posibilidad de estar con él, nunca me había dado pie a dudar de su plena heterosexualidad y como siempre estaba ligando viejas y pensando culearse a cuanta mujer se le atravesaba, pero ahí estaba borrachito y a mi disposición.

Se me prendieron las alarmas y empecé a acercar cautelosamente mi cuerpo al suyo, me sentía muy caliente, pasé mi brazo y lo apreté contra mi cuerpo, no sentí ningún signo de rechazo, eso me dio pie a seguir el plan y metí mis manos entre su camisa y empecé a apretarle las tetillas, él seguía inmutable y  decidí dar el paso decisivo, meter mi mano en su pantalón, pasé por encima de su jean y sentí su bulto, el mío estaba que reventaba, la verdad estaba muy caliente y mi fantasía de estar con este muchacho rico se me hacía realidad, para ese momento ya se había quitado la camisa yo en medio de la oscuridad palpaba su pecho velludo, sus nalgas y todos y cada uno de los poros de su piel fueron explorados por mis sentidos, la verdad que tenía mucho tiempo de no tener sexo tan pleno con alguien, lo que más me gustó fue el olor de su pene, cuando acerqué mi nariz a su sexo, olía a gloria, entre orín y ese olor indescriptible con palabras, pero muy presente en nuestros sentidos.

Aquello me enloqueció más, este macho rico, lindo y muy macho estaba teniendo sexo conmigo sin miramientos, se entregó plenamente a mis caricias de una forma mágica, con mi lengua empecé a recorrer desde su pecho entre su vellos fui bajando hasta llegar a su ombligo donde me detuve, seguí bajando hasta llegar  de nuevo a su verga la cual volví a saborear ricamente, me la introduje en mi boca, noté que su verga es ligeramente torcida en dirección a su ombligo, no muy grande más bien normalita, no muy gruesa, el tamaño perfecto para  disfrutarla, seguí lamiendo su tronco hasta bajar a sus huevos los cuales son grandes  me los metí a la boca y juguete un rato con ellos, ya se hacia de día y los rayos empezaban a colarse por la ventana de mi cuarto, esto me ofreció una rica visión de su cuerpo desnudo, yo estaba dichoso de tener a este espécimen humano todo a mi disposición el disfrutaba de mi mamada de  verga, luego de sus huevos pasé a una de mis favoritas lamer culos, él se abrió y me ofreció sus nalgas, entre ellas su hoyito rico y palpitante, el cual recibió toda mi atención.

La verdad que lo sentía rico, sus pliegues eran tersos, mi boca se posesionó de esta parte de su cuerpo y metí toda mi cara, de vez en cuando alzaba mi mirada y notaba que disfrutaba de mis actitudes, él me preguntó si tenía un condón, le dije que si, la verdad que no me apetece mucho que me penetren, pero en este caso fui capaz de ofrecerle mis nalgas a Juan para que introdujera su rica verga, enseguida le pasé el condón y me lubriqué mi culo para recibir su miembro, él estaba muy caliente y de una me trató de meter su verga, lo que provocó que me echara hacia atrás y no pudiera meterme su miembro viril.

Lubriqué más mi culo y traté de relajarme para que Juan me penetrara, lo volvió a intentar y esta vez si me la metió todas, empezó a bombear de manera frenética, empieza su mete y saca, la verdad, y soy sincero, no disfruto mucho meterme una verga, soy más adicto a que me froten la verga en la entrada pero sin penetraciones, pero Juan estaba tan caliente que quería metérmela y darme duro por mi culo, después de un mete y saca mi culo empezó a relajarse, los movimientos se hacían más acompasados lo que me permitió disfrutar mejor sus embestidas, ya hacía casi una hora de estar en plena faena, decidí que ya era hora de sacarme su verga y que pasáramos a otras cosas.

Él empezó a lamerme mi verga, pero de manera torpe, se ve que no tiene mucha experiencia en eso, le daba besos y la lamía con su lengua, eso me hizo sentir muy bien, este chico es muy caliente y de paso también se entrega a los juegos correspondiéndome de la misma forma, después yo empecé a frotar mi pene con el suyo y a pasar mi verga por su vientre,  me monté de nuevo en su verga y me la introduje,  empecé a culearme y a disfrutar de nuevo su verga, pero esta vez yo tenía el control, luego me la saqué y esta vez fui yo quien le puso mi verga en la entrada de su hoyito.

Jugueteamos un momento más, estábamos muy   calientes, a pesar del aire acondicionado sudábamos como  chivos los dos, después de mucho tiempo alrededor de 2 horas de faena nos cansamos, nos tiramos en la cama, disfrutamos del momento sin hablar, yo le acaricié su frente y le di un beso, fue rico y lindo ese momento, a mi me gusta ser tierno, a pesar de que somos hombres no veo el por qué no darle cariño a alguien, lo abracé y me bajé de la cama, abrí el aire de mi cuarto y me acosté.

Me desperté a las 12 del día, almorcé, Juan seguía durmiendo en mi cama, le pregunté como había amanecido me contestó que bien y me dijo que le dolía la cabeza, le ofrecí un vaso de agua, al rato una coca cola y de nuevo nos quedamos dormidos.

Como a las 4 de la tarde nos despertamos de nuevo y me invitó a que nos tomáramos un refresco en la playa, salimos, no comentamos nada de lo sucedido, seguimos como si nada, estuvimos hasta las 8 de la noche de nuevo nos tomamos 7 cervezas cada uno y esta vez si se fue a la base….
Esta semana no hemos vuelto a hablar, en el mes de julio se va a la selva, lo trasladan, quedé en que le haría una despedida con amigas, veamos que pasa, de repente armamos una orgía con viejas o sino aparecen siempre tenemos la alternativa de echarnos la mano nosotros…

Lukas


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